SECUELAS ONCOLÓGICAS

 

Afortunadamente, los avances médicos nos permiten aumentar la supervivencia tras un proceso oncológico. La cirugía, la radioterapia, la quimioterapia o la terapia hormonal son los principales tratamientos que se aplican. No obstante, en ocasiones puede llevar unas secuelas en el suelo pélvico incluso aunque el cáncer no se ubique en dicha zona.

De mama, de colon y ginecológicos son de los canceres con mayor incidencia en nuestra sociedad. La primera y principal acción es remitir el crecimiento celular inadecuado, pero tras superarlo, muchas personas quedan en abismo de incertidumbre, con poca información y donde dirigirse para prevenir, o tratar las secuelas de un tratamiento duro y en muchas ocasiones largo que afecta a su estado físico y emocional y merma su calidad de vida.

Entre los síntomas y secuelas más habituales que encontramos en la clínica son en la esfera sexual como la atrofia vaginal, la sequedad, la dispareunia o la dificultad orgásmica. La incontinencia de orina o fecal, la incompetencia muscular del suelo pélvico y el dolor también es común por la falta de calidad y/o lesiones directas en el musculo del abdomen y del suelo de la pelvis. Sin olvidar la posible presencia de cicatrices postquirúrgicas que alteren al funcionalidad local y global de la zona.

 

“No somos responsables de las secuelas, pero si de lo que hacemos con ellas”

“No somos responsables de las secuelas, pero si de lo que hacemos con ellas”

La fisioterapia oncológica puede ayudarte a mejorar o remitir estos síntomas mejorando así tu calidad de vida. Siéntete libre para preguntar y contarnos que te ocurre, te guiaremos a recuperar tu bienestar.

“Los tratamientos de fisioterapia oncología y ejercicio terapéutico están reconocidos por la SEOM (Sociedad Española de Oncología Medica) como necesarios para el cuidado del paciente con cáncer y demuestran que mejoran su calidad de vida”